viernes, 6 de mayo de 2016

Oda al agua


Pura cristalina y transparente
Refrescante en las calurosas tardes estivales,
Alegre, y cantarina, cuando corres por los valles
Tranquila y brillante en los lechos ríos.

Tan constante cuando del cielo caes
Zapateando con fuerza sobre los tejados,
En oscuras cortinas cuando arremetes
En los largos días de invierno
Y yo desde mi ventana tan tranquila te contemplo,

Avece vas dejando estelas de vapor
Cuando abrazas al café
Y yo te bebo dulce y amarga
Y el calor de tu cuerpo, va entibiando mi alma
Tan necesaria en los campos, tan vital
Tu que a veces faltas.
Y escarban la tierra para ver donde te escondes
Y otras veces desde el cielo
Caes con violencia imparable
Que vas creciendo. y todo,
Todo lo arrasas.

A veces te contemplo allá en la alta montaña
Blanca y eterna e inmaculada
Y te conservas allá lejos
Para el día de mañana,
fría , dura y solidificada .

¿Quien pudiera decir
Que no eres necesaria?
Vas saciando de a sorbos
Esta sed que me que me abraza
Y sobre los mares te meces
Tan inmensa Y salada.

Tu húmeda boca e besado mil veces
Buscando la frescura que me sacia,
Y tu sangre cristalina que corre
En libres torrentes ,
Cuando bajas de las montañas.


Liquido puro, agua bendita
A t i quiero beberte
Dejarte correr libre
Sin los tranques que te detienen,
Te quiero libre, cayendo como lluvia
Corriendo en los ríos,
En el mar tan profunda
En las nubes como espuma,
Elevándote hacia el cielo
Como hilos de neblina,
Siempre dura siempre
Fría, en los témpanos inmensos,
Eres el elemento vital de la vida,
Agua, limpia, pura y cristalina




Marta Barrera, ( Shay-mar)

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